El pasado mes de agosto, la cámara de Diputados comenzó con el debate sobre el esperado proyecto de "alcohol cero al volante". Según se busca a través de esta nueva normativa, se eliminaría cualquier tolerancia que exista actualmente al consumo de bebidas a la hora de conducir.
Si bien hay distritos que ya tienen este sistema incorporado hace ya bastante tiempo, el proyecto de ley pretende unificar este criterio a nivel nacional y prohibir la conducción con cualquier grado de alcohol en sangre que sea superior a cero. En algunos casos, la tolerancia está establecida en 0,5 para manejo dentro de ciudades.
Esta medida es ampliamente aprobada por la gran mayoría de los sectores de la sociedad, por considerarse un tema indispensable para la salud pública. En este sentido, la Organización Mundial de la Salud establece que, con una graduación de entre 0,1 y 0,5, se corre tres veces más riesgo de sufrir un accidente que si se manejara con alcohol 0.
Pablo Martínez Carignano, director de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, expresó su apoyo a este proyecto y alertó que el sector más afectado por los accidentes de tránsito son los jóvenes de entre 15 y 35 años. De hecho, el 40% de las muertes corresponde a esta franja etaria.
No todos están de acuerdo
A pesar de que una medida así puede parecer que generará consenso unánime en todos los sectores sociales y políticos, la industria vitivinícola de nuestro país se ha mostrado en desacuerdo con el nuevo proyecto.
Según creen desde la Corporación Vitivinícola Argentina, la nueva ley de tolerancia cero no va a solucionar nada y proponen dejar el límite en 0,5, a la vez que se endurecen los controles y se invierte en una mejor educación vial. Por otro lado, la propuesta del sector también busca que la tolerancia cero esté restringida únicamente para menores de 25 años.
Desde la gobernación de la provincia de Mendoza, principal región productora de vinos, avisaron que el propio Gobernador, Rodolfo Suárez, intercederá ante el ministro de Economía para gestionar estas propuestas. Algo similar hará el Gobernador de la provincia de San Juan, José Luis Gioja.
Las cámaras empresarias comienzan con su lobby político en busca de frenar una medida que ven como una potencial amenaza a su industria. Aun así, muchos otros sectores como el de los seguros de autos, los fabricantes de vehículos y otros similares, que podrían tener intereses en juego, aún no han expresado una opinión oficial sobre el asunto.